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La Laguna Cejar se encuentra dentro del Salar de Atacama, a 20 kilómetros de San Pedro de Atacama. Se reconoce por el fuerte color calipso del agua y está rodeada de sales de diversas formas. Sus aguas al ser salinas permiten que los cuerpos floten y permanezcan sin hundirse, debido a que la carga de sal es mayor que el peso de la persona.

Los atacameños los llamaban Ojos del Salar porque son dos lagunas azules de agua dulce en medio del Salar de Atacama. A diferencia de la Laguna Cejar y la Laguna Tebinquiche, las lagunas Ojos del Salar son mucho más profundas.

Una laguna divina formada gracias a los deshielos y lluvias que caen durante el año en el desierto más seco del mundo. Esta maravilla tiene poca profundidad (solo unos pocos centímetros), lo que le permite parecerse a un enorme espejo, que refleja la belleza de zorros, flamencos y otras aves de la zona. Con estos asombrosos paisajes, disfrutarás de un cóctel contemplando el reflejo de los Andes en sus aguas, junto con la blancura de la sal.

Luego de tu increíble experiencia en las Lagunas con hermosos paisajes, regresarás a San Pedro de Atacama. El descenso será en el mismo punto donde te recogieron o en la plaza del pueblo.