La primera parada del recorrido es el Museo Titanic Experience, donde podrás explorar el simbolismo del Titanic, una de las estructuras más emblemáticas de Belfast. Ponte en la piel de los hombres que construyeron el barco más célebre del mundo en el histórico astillero de Belfast, y visita nueve galerías interactivas con exposiciones de última generación equipadas con efectos especiales, atracciones y recontrucciones a tamaño completo.

La segunda parada del recorrido te lleva al castillo de Carrickfergus. Construido por el anglonormando John de Courcy hace más de 800 años, el castillo de Carrickfergus fue durante mucho tiempo el epicentro de una lucha de poder por parte de aquellos que deseaban hacerse con el control del puerto. El castillo alberga actualmente exhibiciones históricas y cuenta con cañones de los siglos XVII-XIX, murallas, mazmorras y escaleras sinuosas con peldaños a diferentes niveles para disuadir a los invasores. Más tarde, podrás hacer fotos y admirar unas vistas fantásticas desde el puente de cuerda de Carrick-a-Rede, un puente situado a 30 metros de altura que conecta la pequeña isla de Carrick-a-rede con tierra firme.

La siguiente atracción es la Calzada del Gigante. Cuenta la leyenda que el gigante irlandés Finn McCool construyó la calzada para viajar a Escocia y luchar contra su rival Benandonner. La calzada consta de 40 000 columnas hexagonales de basalto entrelazadas a lo largo de 6 kilómetrosde la costa norte de Irlanda del Norte. Fue creada por la actividad volcánica durante el Terciario, entre 50 y 60 millones de años atrás. En 1986, la Calzada del Gigante fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y sigue siendo una de las atracciones más famosas de Irlanda del Norte.

La última parada del itinerario será una parada para hacer fotos en las emblemáticas ruinas del castillo de Dunluce, testigo de una larga y tumultuosa historia. Construido sobre los espectaculares acantilados del norte del condado de Antrim por la familia MacQuillan alrededor de 1500, el castillo ha sido escenario de la película El poder del talismán (2001) con Jackie Chan. También ha sido inmortalizado en la cubierta del álbum Houses of the Holy (1973) de Led Zeppelin.