A 40 km al norte de Essaouira, Ain Lahjar es un oasis escondido, dentro de los límites del sur de Dejbel Lhdid. Un pequeño paraíso de frescura. En este lugar, una próspera ciudad data del siglo XVI, cuyos restos son una mezquita y el mausoleo de Sidi Ali Rahmoun. Rodeado por el bosque de argán, un hermoso palmeral recuerda a los paisajes presaharianos. Este pequeño paraíso se beneficia de una fuente de agua, que brota de la roca y alimenta un pequeño río. Desde la época del protectorado se construyen balsas y abrevaderos para los rebaños, así como diques para el desagüe de las huertas. Los campos de hortalizas crecen a la sombra de granados, higueras, olivos y palmeras. La fuente es un regalo para toda la región, los campesinos recorren, a lomos de burros, varios kilómetros para conseguir agua. Durante el verano, los chicos se bañan en las piscinas y diques. La riqueza agrícola de esta zona es perceptible a través de las muelas de piedra que servían para los tradicionales molinos abandonados. Aquí vivirás un momento inolvidable con la población local. Después de una caminata visitas a una familia del palmeral que te abre la puerta de su casa para compartir contigo momentos inolvidables.